La Secretaría de Industria y Comercio, dependiente del Ministerio de Economía, implementó una nueva normativa que autoriza la exhibición de los precios de productos y servicios al público en dólares o en otras monedas extranjeras.
Esta medida fue formalizada mediante la Resolución 4/2025, publicada el viernes en el Boletín Oficial, cuyo principal propósito es promover una mayor transparencia y claridad para los consumidores, alineándose con las actuales prácticas comerciales y el contexto económico del país. La norma establece que, aunque se debe exhibir obligatoriamente el precio en pesos, se podrá incluir el valor en dólares u otras divisas, con menor relevancia.
Además, la nueva disposición establece que los comercios deberán indicar el precio por unidad de medida y asegurar que el precio en la góndola coincida con el cobrado en caja. En los casos de compras financiadas, se deberá detallar el precio al contado, el monto y la cantidad de cuotas, así como el costo financiero total efectivo anual (CFTEA), según lo estipulado en el comunicado oficial.
La resolución también permite a los proveedores de servicios que operan con el exterior mostrar los precios en dólares. Los precios deben ser exhibidos de forma clara, visible, legible y horizontal, ubicados en un lugar accesible para los consumidores. Las listas de precios, a su vez, deberán estar expuestas en puntos de fácil acceso y los comercios podrán elegir si las presentan de forma digital o impresa.
A partir del 1 de abril, los establecimientos deberán incluir la leyenda "PRECIO SIN IMPUESTOS NACIONALES" en un tamaño reducido en las góndolas, indicando el precio sin el IVA ni los impuestos nacionales indirectos. Esta norma también será aplicable a los anuncios publicitarios en cualquier medio.
La resolución reemplaza la normativa vigente desde 2002, que regulaba de forma detallada cómo debían exhibirse los precios de productos y servicios. Con esta nueva disposición, se busca simplificar el sistema y garantizar que los consumidores puedan acceder de manera más eficiente a la información sobre los precios finales, tanto en establecimientos físicos como en plataformas virtuales. Los descuentos y ofertas podrán presentarse de forma independiente, pero siempre con la información clara sobre el precio total.
Finalmente, la nueva regulación actualiza las prácticas comerciales y permite un mayor acceso a la información para los consumidores, facilitando la comparación de precios de manera más transparente.
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