El método predilecto de los argentinos a la hora de ahorrar es la compra de moneda extranjera, particularmente del dólar. Al ser un mercado que por lo general se maneja en billetes, esto hace que haya que prestarle atención al almacenamiento y cuidado de los dólares, dado que son permeables al deterioro.
Si bien existen maneras de preservar su integridad física almacenándolos de una manera donde no corran peligro, en el caso de que hayan sufrido algún daño, existen distintas maneras de hacerlos valer.
Entre las soluciones es posible depositar billetes que estén al menos en un 80% en buen estado en la cuenta de ahorros en dólares del usuario en su respectivo banco. Luego, en una visita posterior, existe la posibilidad de retirarlos y, con suerte, recibir billetes en mejores condiciones. Cabe recordar que el Banco Central de la República Argentina no recibe billetes de dólares rotos o dañados para intercambiarlos por otros sanos y dárselos al ciudadano.
Según trabajadores del organismo nacional "si tienen detalles mínimos como un leve desgaste, una manchita o cortesito los tomamos, pero si están mal cuidados, los dejaron en un lugar húmedo y se encuentran amarillos o todos manchados no". Es pertinente destacar que ante estas situaciones los bancos son libres de imponer sus reglas, así que no hay reclamo que valga.
Otra opción para aquellos que tengan la posibilidad, es intercambiar los dólares en Estados Unidos ya que allí, la Reserva Federal y los bancos sí reciben esos billetes y los intercambian por ejemplares que se encuentren más íntegros, a diferencia de Argentina donde las posibilidades son casi nulas.
Fuente: Ámbito
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